Manifiesto a favor de Israel…

METZADA

  • El Pueblo Judío tiene derecho a su territorio según la Resolución 181 de Naciones Unidas de 1947, a fronteras seguras y defendibles según la Resolución 242 de las Naciones Unidas de 1967 este Estado se llama Israel desde 1948.
  • El Estado   democrático de Israel, siempre  reconoció el derecho de existencia de un territorio para un Estado árabe, basado en la misma resolución 181 de la ONU de 1947, y  basado en la premisa de la «autodeterminación de los pueblos». Todos los gobiernos israelíes tienen plena conciencia que la solución justa y digna para la paz es la fórmula «Dos Estados para dos pueblos», por ende reconocen el derecho del pueblo palestino a tener un Estado soberano, a través de negociaciones directas sin condiciones previas con Israel.
  • El actual giro que ha dado el conflicto; denominado por algunos como la “Intifada de los cuchillos”, es una nueva escalada de violencia por medio del terror de parte de fanáticos palestinos contra ciudadanos Israelíes principalmente civiles, valiéndose de muchas tácticas. Una de ellas disfrazados de periodistas, algo que violenta el Artículo 4 A del III Convenio de Ginebra y Artículo 79 del Protocolo adicional I. De la misma manera como en algún momento las agrupaciones terroristas de Gaza han utilizado transporte de ambulancias del “Cuarto creciente rojo” como vehículo para movilizarse. Aunque tenemos presente que a los terroristas el derecho internacional solamente les interesa cuando les beneficia en su afán de que Israel sea condenado, ellos en pleno no reconocen las normas del derecho internacional y ni siquiera muchos valores de la declaración universal de los derechos humanos.
  • En el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas se reconoce el derecho a la legítima defensa en caso de agresión contra la soberanía de un Estado por agentes externos al mismo. “…Ninguna disposición de esta Carta menoscabará el derecho inmanente de legítima defensa, individual o colectiva, en caso de ataque armado contra un Miembro de las Naciones Unidas…». Por lo tanto el Estado de Israel, haciendo uso a ese derecho se ha tenido que enfrentar a una nueva escalada de violencia al estilo de las intifadas de los años 1987 y 2000 en la cual sujetos no militares palestinos, haciendo uso del terror atacan ciudadanos israelíes con cuchillos y otros elementos con la finalidad de asesinarlos.
  • El Estado de Israel reclama por razones obvias el derecho a  la legítima defensa cuando se ve amenazada su estabilidad y supervivencia por agentes externos, especialmente por el actuar de organizaciones que son declaradas terroristas por otras naciones del mundo y la opinión pública, como lo son Hamas, Yihad Islámica, Hezbollah, el Frente Popular para la Liberación de Palestina y agrupaciones de similar naturaleza.
  • El Estado de Israel en la persona de su Primer Ministro Benjamín Netanyahu ha hecho un llamado a la paz y a retomar las negociaciones de inmediato y sin condiciones previas, a pesar de la negativa de los dirigentes palestinos y el silencio de la comunidad internacional ante la escalada de violencia que hoy sufre el pueblo judío.
  • El Estado de Israel está haciendo lo necesario para detener la escalada de violencia y proteger la vida de todos sus ciudadanos, procurando en la medida de lo posible generar la menor cantidad de bajas civiles entre ciudadanos palestinos de los territorios de Judea y Samaria y advirtiendo a los activistas palestinos y miembros de los grupos islamistas de la Franja de Gaza que no violen los límites de seguridad que el enclave costero tiene con Israel.
  • Denunciamos el uso desmedido de la propaganda contra Israel en esta nueva escalada, así como se ha hecho en otras ocasiones, porque esto solamente atiza el fuego de la violencia que se genera en la región. Y exigimos enfáticamente una cobertura veraz y objetiva en los medios de prensa y agencias noticiosas nacionales e internacionales.
  • Presentamos nuestro reclamo a las autoridades internacionales promotoras del movimiento “Boicot, Desinversión y Sanciones” (BDS en sus siglas en inglés) por promover antisemitismo solapado y explícito, y querer golpear sectores productivos de Israel que además les brindan fuentes de empleo a ciudadanos palestinos que diariamente cruzan la frontera para conseguir el sustento para sus familias.
  • Elevamos nuestras voces de protesta contra La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) por promocionar una resolución que declararía al Muro Occidental de Jerusalén (Muro de las Lamentaciones), uno de los principales lugares sagrados para el pueblo judío, como patrimonio islámico, que fomentan provocaciones de carácter religioso que pueden generar un caos mayor del que ya se vive en la zona.

Así mismo, criticamos las intenciones de la UNESCO de proclamar las tumbas de los patriarcas judíos de Hebrón como patrimonios islámicos, convirtiéndola en una falsedad histórica sin precedentes.

  • Acusamos a las organizaciones terroristas de Hamas y la Yihad Islámica por exponer la vida de civiles inocentes de ambos lados del conflicto, tanto de Israel como de la Franja de Gaza, en su afán de seguir cosechando triunfos militares de su campaña terrorista y demonizar al Estado de Israel, incurriendo así en claros crímenes de guerra. Estos hechos están siendo documentados por estaciones de televisión árabes radicadas en Medio Oriente y tienen poca difusión en los países de Latinoamérica, incluyendo Costa Rica.
  • Acusamos también al gobierno de Abu Mazen (Mahmoud Abbas) presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) por no hacer lo suficiente por detener la escalada violenta de sus ciudadanos en los territorios de la Margen Occidental, sino que se mantiene en una culposa inacción mientras las revueltas comienzan a subir el nivel de violencia manifestado. Exhortamos a las partes a seguir cumpliendo los Acuerdos firmados en Oslo y no cometer el error de derogarlos unilateralmente, con el fin de no reactivar niveles de violencia mayores a los actuales.
  • Instamos a los medios de información nacional a difundir las noticias que muestran el terror y dolor en las personas civiles israelíes inocentes y ajenas al conflicto, de la misma forma con que nos inundan constantemente con imágenes de civiles palestinos, lo cual es en un verdadero desequilibrio de la información.
  • Hacemos un llamado a las autoridades costarricenses a pedir ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que intervenga en el conflicto exigiendo a las agrupaciones islamistas detener sus llamados incesantes de guerra santa contra el Estado de Israel y que evite que más sangre inocente siga corriendo por las calles de ambos pueblos.

Deja un comentario